Las postales son la huella que nos queda de una España pasada, material propagandístico del franquismo, que vió en el turismo una herramienta para el apoyo internacional y el sustento económico. Pero de esa época fascista, además de las postales aún encontramos algunos “fósiles” diseminados a lo largo de toda la geografía. Numerosos monumentos conmemorativos del poder franquista siguen todavía en pie tras años del fin de la dictadura.
La nueva colección de postales de “Paisajes de España” recoge una serie de enclaves de la geografía española que se han resignificado al eliminar una parte de la imagen, los monumentos fascistas.